Teixu l’iglesia o Teixu/Tejo de Bermiego

Bermiego. Asturias

  • ESPECIE

    Taxus bacatta

  • ALTURA

    13 metros

  • Perímetro del tronco

    7,70 metros

  • EDAD

    1000 años

Localización

Historia, leyenda y curiosidades

Aunque en Quirós y en Asturias es conocido como «Teixo de Bermiego», por su vinculación al pueblo de Bermiego, en el pueblo el nombre que recibe es el de «Teixu l’iglesia» por estar situado aledaño a la iglesia parroquial de Santa María, la cual se encuentra algo alejada de las casas del pueblo de Bermiego. En la antigüedad era costumbre construir las iglesias donde se encontraban lugares de culto anteriores al cristianismo, de ahí que se crea que era un árbol venerado, ubicado en el entorno de un antiguo castro. El primer documento que menciona el pueblo es del año 857 y la iglesia en otro del año 1100
Antiguamente también se encontraba en su entorno el antiguo camposanto de la iglesia, trasladado hará más de ciento cincuenta años. Al tejo en la creencia popular, dada su longevidad, se le consideraba sagrado al hacer de intermediario de las almas o espíritus de los vecinos del pueblo de Bermiego.
Los vecinos que emigraban del pueblo a finales del S. XIX y primeros del XX en sus cartas preguntaban en primer lugar por los familiares, de si se encontraban bien, etc., y luego igualmente por el estado del Teixu.
Por su entorno pasaron en el año 718 d.c. las Reliquias del Arca Santa, con el Santo Sudario, en su periplo desde Jerusalén hasta la catedral de Oviedo. En el año 614 el rey de Persia Cosroes II conquistaba Jerusalén y por eso fueron sacadas para que no cayeran en sus manos, llegando a España por Cartagena y luego trasladadas a Sevilla y finalmente hasta Toledo por entonces capital del Reino Visigodo, donde permanecieron más de 100 años. Con la entrada de los árabes en la península se procedió a un nuevo traslado hasta las montañas asturianas, pasando por Babia (León), a través del Puerto de Ventana y cruzando el actual concejo de Quirós, por Bermiego y la capilla de La Merced, llegaron hasta el Monsacro (concejo de Morcín), donde las escondieron en una cueva, levantándose para su protección una capilla prerrománica de planta octogonal, conocida con el nombre de su promotor, Santo Toribio. En el año 808 el Rey Asturiano Alfonso II “El Casto” las traslada a la Cámara Santa, que para tal fin la había creado, integrada posteriormente en la actual catedral de Oviedo. Quizás este Teixo o un antecesor suyo fue testigo de este paso. Alfonso II el Casto, fue asi mismo el promotor de la veneración de Santiago apóstol, siendo considerado el primer peregrino, que dio origen al actual Camino de Santiago, con motivo de su relación con Carlomagno en la lucha contra la invasión árabe.
Como curiosidad, la expresión «tirar los tejos» parece provenir de una costumbre celta que tenía lugar durante la festividad del solsticio de verano, que consistía en que las mujeres jóvenes arrojaban semillas de tejo a los varones que gozaban de su predilección.

Importancia del árbol y motivo de la presentación al concurso

Se encuentra declarado Monumento Natural por el Principado de Asturias y en el año 2008 obtuvo el premio al árbol más longevo al ser uno de los árboles más viejos de toda la península ibérica y uno de los más bellos de Europa.
Además de su monumentalidad y presentar gran vigor a pesar de sus mil años, se encuentra en un paraje de gran belleza, muy bien conservado, a unos 746 m de altitud, con unas esplendidas vistas del Parque Natural de Las Ubiñas-La Mesa, Reserva de La Biosfera, en el Paisaje Protegido de la Sierra del Aramo.
Constituye un emblema hoy en día tanto para los vecinos de Bermiego, como para los quirosanos y asturianos en general, siendo muy visitado todo el año al ser fácilmente accesible a pie desde el pueblo.
En la actualidad se está procediendo a tomar medidas de protección como ha sido la poda de otras especies arbóreas que le hacían sombra, y al estudio de un pequeño cierre perimetral disuasorio, de solo unos centímetros de altura y no hincado, que evite la excesiva compactación del suelo en el entorno de su tronco, junto con un cartel explicativo que conciencie a todos los visitantes de la necesidad de esta medida de protección, entre otras más obvias, de ahí que se pretenda promover al Teixu l’iglesia como Árbol del año y difundir así la necesidad de su protección y cuidado por parte de todos y que a veces esas pequeñas acciones reiterativas de cortar un pequeño brote o la compactación del entorno inmediato a su tronco, etc. pueden dañarlo y lo que aún no es grave si llegar a comprometer su salud. Y así las próximas generaciones podrán seguir disfrutando de él.